Fiscalía tipifica como homicidio voluntario crimen de niña decapitada

Santo Domingo, R. D.- La fiscalía del Santo Domingo Este tipificó como homicidio voluntario con asechanza, premeditación y alevosía, crimen de niña decapitada, que viola los artículos del código penal 295, 296, 297 y 304.
En el expediente fijó como víctimas a Esmerlyn Javier Frías Martínez, padre de la niña Eleanna Frías García, muerta decapitada. Se presentó acusación formal a Ana Josefa García Cuello
El expediente, que consta de 27 páginas, revela que la acusada, llamó en varias ocasiones a su esposo luego de salir a las 07:08 de la mañana de su residencia hacia su trabajo.
Luego de una videollamada de la acusada al padre de la víctima es que éste avisa a una vecina de nombre Pedia Antonia Tejada Pinales para que fuera a su casa a percatarse de la tragedia.
Acto seguido, la vecina Tejada Pinales subió al tercer piso y el hijo de 5 años le abrió la puerta del apartamento, y encuentra la escena del cuerpo de la niña en la cocina y la cabeza en el baño.
Cuenta el expediente que debajo del cuerpo de la infante se encontraron dos anillos de bodas (propiedad de la acusada), varias prendas de vestir ensangrentadas.
Relata el documento que en un solar contiguo a la ventana de la habitación de la pareja se encontró un cuchillo de 14 pulgadas con cabo naranja y un t-Shirt negro con literatura Vintaje.
Explica el expediente, que luego de una entrevista al menor, confesó que su madre habría arrojado el cuchillo desde la ventana al terreno antes mencionado.
Entre las pruebas que contiene el expediente están el testimonio del esposo de la acusada, Esmerlyn Javier Frías Martínez. También los testimonios de la vecina Tejada de Linares y el cabo Cleisy Binet de la Policía Nacional, como primer agente que llegó al lugar.
Pruebas documentales
El acta de levantamiento del cadáver, acta de arresto en flagrante delito a nombre de la imputada. También el acta de registro de personas que corresponde a la imputada y el acta de inspección técnico policial, figuran entre las pruebas.
Como pruebas materiales, la fiscalía presento el cuchillo de 14 pulgadas con el que supuestamente se cometió el crimen.
Relato del menor
Relata el expediente que el menor declaró que el cuerpo de su hermanita estaba en el piso. Que el atracador llegó y la acuchilló en la cara y su madre recogió el cuchillo y «lo tiró por la ventana de mi habitación».
Relató el menor en dos ocasiones, que su madre no mató a su hermanita y sin preguntarle. En una tercera ocasión se alteró y repitió con voz alarmante que su madre no mató a su hermanita.
Contó que mientras dormía, su madre lo despertó y le dijo que un atracador había entrado a la casa. La madre le dijo al menor que el atracador habría matado a su hermanita y confiesa que nunca vio al atracador.
Acto seguido su madre le dijo que su hermanita estaba en el salón. Cuando la vecina llegó y le preguntó por la niña, la madre contestó que no sabía. Ya la niña estaba muerta en la cocina.
Tras esa escena, el niño fue trasladado a la estación de policía y allí vomitó y dijo que no quería comer nada. Pensó, dice el expediente, que su corazón le decía que Dios mandó a buscar a su hermanita.
Una y otra vez el niño repitió que su madre no es la culpable del hecho, al tiempo de narrar que al momento de ser arrestada por los policías su madre se resistía a ser detenida.
El menor le dijo a la policía que el atracador no le hizo daño ni a él ni a su mamá y que solo mató a su hermanita. Aseguró que nunca lo vio.
Dice el expediente que el menor acudió al interrogatorio acompañado de su padre (quien firmó el consentimiento de la entrevista) en perfecto estado físico, higienizado, bien peinado en sano juicio.
El menor mostró reactividad, tristeza, preocupación, miedo y llanto contenido.
El expediente revela que el menor confeso que el cadáver de su hermanita estaba tirado en el suelo de la cocina sin la cabeza. Ante esa escena el niño dice que su madre Ana lloro solo un poco cuando vio a su hermana tirada en el suelo y luego llamo a la policía.
Algunos detalles del interrogatorio
El menor no vio ningún atracador, Ana lanzo el cuchillo ensangrentado por la ventana de la habitación del menor. El menor dijo de manera alterada que Ana no había matado a su hermana, sin hacerle ninguna referencia del caso. En otro relato el menor dice que Ana no era culpable, sin mencionarle nada relacionado con la culpabilidad de su madre.
También cuando Ana encuentra el cadáver de Eliana solo llora un poco.
Ana le dijo al menor que el atracador acuchilló a Eliana en la cara, pero el atracador no le hizo nada a Ana, porque ella estaba dormida.
Finalmente, el menor dijo que la puerta tenía seguro porque Ana se había puesto y luego declaro que no tenía seguro la puerta.